Moria
Unahoramenos Producciones
Dirección: Mario Vega
30 de noviembre, 18:00* y 20:00 h
Teatro Juárez
*Al final de la función de las 18:00 horas habrá charla con el director Mario Vega.
Moria
En el campamento de refugiados de Moria, en la isla giega de Lesbos, “diseñado para 3.000 personas” han llegado a hacinarse más de 20.000. Las ONGs han decidido salir de la zona amurallada para no ser cómplices de esta vergüenza.
Las condiciones en el campo de refugiados de Moria son tan inhumanas que las ONGs han decidido abandonar el espacio a modo de protesta. Médicos Sin Fronteras, que abandonó el campo pero se quedó en las inmediaciones para poder seguir desarrollando su labor humanitaria, afirma que la situación actual en Moria se acerca más a la de un campo de concentración que al espacio de gestión de urgencia humanitaria proyectado por la Comunidad Europea en 2015. Se han llegado a hacinar más de 20.000 personas en un espacio diseñado para 3.000 y se han sucedido episodios de violencia, incluso entre los refugiados, dadas las pésimas condiciones para una mínima convivencia. Las personas con más suerte comparten tiendas de campaña con hasta cuatro familias, llegando a vivir en torno a 20 personas por espacio habitable. No solo no hay acceso a electricidad o agua corriente, el solo hecho de acudir al baño se convierte en otra odisea con colas de hasta 70 personas por cada WC. Tal sobrecarga en los servicios genera colapsos hasta el punto de que una madre, con un recién nacido, cuenta que cría a su hijo entre heces y mal olor. Los que tienen peor suerte viven en zonas aledañas, sin acceso a dichos servicios y se cobijan a duras penas bajo sábanas, lonas impermeables o cualquier material que les sirva de refugio. La mayoría sufre condiciones inhumanas. Ya casi no quedan refugiados sirios. Los afganos y africanos colman este infierno que se suponía iba a ser un ejemplo en la gestión de crisis humanitarias. Menores no acompañados, peticiones de asilo rechazadas, aislamiento del entorno y la situación de extrema violencia lleva a un auge de suicidios e intentos de suicidios alarmantes. En el peor campo de refugiados de Europa se atisba la herencia más oscura del pasado del viejo continente: volvemos a tener campos de concentración de los que afirmamos no saber nada.
Europa convierte las islas en jaulas, en infernos para los que buscan un futuro. Moria como metáfora de un modelo que se replica desde Lesbos a Canarias, Lampedusa, Sicilia, Melilla, Ceuta, Calais o Los Balcanes… son vertederos de los derechos humanos.
Teatro documento
Este espectáculo cuenta la historia de dos refugiadas y sus familias a las que no les queda más remedio que huir de sus respectivos países. La dramaturgia se sostiene a partir de testimonios reales filmados en el campamento de Moria bajo la supervisión de Nicolás Castellano, reportero especializado durante los últimos 20 años en movimientos migratorios forzosos y derechos humanos. Zohra Amiryar tuvo que sobrevivir a cuatro bombardeos y atentados en su pais, Afganistán, perder a su hermano en uno de ellos y ver como sus cuatro hijos acababan heridos en el último de esos ataques para emprender el éxodo en busca de un refugio para su familia. Y Douaa Alhavatem una treintañera iraquí que tuvo que abandonar su Bagdad natal después de la desaparición de su marido por miedo a que ella y sus tres hijos pudieran correr la misma suerte. En el viaje, ella y sus pequeños, lo dieron todo por perdido después de 11 horas en alta mar sin señal de ningún barco de rescate. Ambas viven en Moria una nueva etapa de sufrimiento que jamás habrían imaginado que parecerían al pisar suelo europeo, el lugar en el que creían que por fin se iban a sentir seguras. Un espacio común, donde les acompañan infinidad de personas desconocidas, quienes también transitan por el peor momento de sus vidas.
Teatro inmersivo
Moria es una experiencia de teatro inmersivo. Una forma de teatro envolvente en el que el público es libre de elegir cómo vive la experiencia. Las dinámicas y la relación con el público son muy diferentes y el espectador tiene la posibilidad de construir su propia historia. En esta propuesta el espacio cobra una gran relevancia, llegando a incidir directamente sobre la dramaturgia. La audiencia no se compone de espectadores pasivos sino que estos forman parte de la puesta en escena, por pequeño que sea su papel, están sumergidos en la acción. Están autorizados a explorar el espacio escénico como quieran. Son invitados a convertirse en parte activa de la actuación. Las líneas entre el intérprete y el público y entre la ficción y la vida están borrosas. La audiencia se sumerge en la historia. Ya no solo es testigo. Está en el lugar de los acontecimientos sin un proscenio que lo separe de la acción dramática. ¿Por qué va a seguir el teatro exigiendo un público principalmente pasivo? El público mira a esta tragedia con indiferencia cada día, desde la pantalla de su dispositivo. ¿Será distinta su manera de ver la realidad si por un momento de su vida forma parte de ella?
Los asistentes vivirán la experiencia dentro de una tienda como la de un campamento de refugiados. Durante 40 minutos, sentirán la esperanza, la celebración, la vergüenza, el miedo y hasta la sombra de la muerte que se cierne sobre este campo de refugiados. Un espectáculo que combina la interpretación con los contenidos audiovisuales filmados en 360º.
Créditos
Un texto de: Ruth Sánchez, Marta Viera, Mario Vega, Luis O´Malley, Nicolás Castellano y Valentín Rodríguez
A partir de las entrevistas a: Saleha Ahmadzai (Afganistán), Zohra Amiryar (Afganistán) y Douaa Alhavatem (Irak)
Elenco: Ruth Sánchez y Marta Viera
Desarrollo pedagógico: Gemma Quintana
Dramaturgia escénica: Luis O ́Malley
Fotografía y video: Anna Surinyach
Asesor de contenidos: Nicolás Castellano
Dirección de producción: Valentín Rodríguez
Dirección y espacio escénico: Mario Vega
Dirección técnica: Ibán Negrín y Tony Perera
Diseño de iluminación y proyecciones: Tony Perera
Espacio Sonoro: Blas Acosta
Asesoramiento de caracterización: Nauzet Afonso
Técnicos de escena: Raquel Hernández y Erick González
Foto y video de escena: Aridane Díaz y Gino Maccanti
Voz en off: Angels Barceló, Susana Moyano y Salim Yeraij Hanna
Administración: Elena Álamo
Producción en gira: Silvia Barona
Prensa: Paco Medina y Patricia Moralejo
RRSS: Raquel Hernández
Distribución en Canarias: Desirée Bolaños www.unahoramenos.es
Distribución en Península: Nacho Vilar Producciones www.nachovilar.com
Producción en México: Contenidos Artísticos www.contenidosartisticos.com